Cuento sobre los sueños e ilusiones

Como continuación natural del último post no me resisto a publicar este cuento escrito por mi hace muchos años y que creo que viene como anillo al dedo... A LA HORA DE PERSEGUIR PECES DE COLORES Las doce. Un gallo cantarín, de esos que viven en los relojes hechos para ciegos, avisaba que el sol de la mañana había llegado al mismísimo centro del cielo. Uno nunca sabe cuando están de buen humor los peces de colores. Y es que ya se sabe que son un poco caprichosos y creidillos, por eso de ser los más bonitos de los mares, con eso de que todos los miramos, los requetemiramos y los admiramos... El calorcito con el que el sol del verano nos despierta, hace que me entren ganas de jugar. Por eso he decidido ir a buscar a los peces de colores, con idea de atraparles y de divertirnos juntos. La noche había estado tranquila, y el mar se había dormido sereno. Así que pensé que los peces habrían podido descansar bien. Aún más importante que el hecho de querer jugar con ellos con todas las...