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Los 5 mejores post de 2012

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Lo mejor de 2012 Hoy finalizamos mes y año, muchos hacemos balance en un sano ejercicio de aprendizaje. Por una parte se trata de ver cuánto camino hemos recorrido, de sentir la satisfacción del esfuerzo realizado y de las metas alcanzadas. También está la parte de lo no conseguido, de lo que tal vez se perdió para no volver más, de los errores o de las insatisfacciones. Se trata de mirar para reconocer y para aceptar. Pero por otra parte hay una mirada hacia lo que queda delante y hacia la ruta que habrá que seguir en cuanto emprendamos de nuevo la marcha. Desde una visión muy subjetiva dejad que os recomendemos los que consideramos los 5-8 mejores post de 2012 de los 45 publicados, y que os comentemos su porqué: 1.- Cuento sobre la veletas o cómo se pueden ver y sentir las cosas de manera distinta:   http://entrenando-emociones.blogspot.com.es/2012/01/cuento-sobre-veletas-o-como-las-cosas.html Una de las constataciones del año es el éxito que han tenido los cuentos pu...

Cuento sobre el amor del mar y la playa

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Amor entre el mar y la playa No se sabe, en realidad, cuantas olas nacen y mueren cada día. Nunca pude terminar de contarlas. Antes de acabar siempre me quedo absorto mirándolas. Y es que siento una gran atracción por su fortaleza y ese afán de llegar a un destino en el que se encontrarán con su final.  Parecen alegres.  Algunas, incluso, rebosan espuma de la emoción. También se levantan orgullosas y pasean su energía mientras se alzan ante el inminente contacto con la playa. Y cuando, por fin rompen, mas que una muerte es un estallido que pretende dejar las cosas en su sitio, una especie de aquí estoy yo. Las olas son fuertes viajeras, peligrosos enemigos en días de mar gruesa, divertidos juguetes en el cálido verano para los niños. Guardan, como todos, diversas caras que presentar dependiendo del viento que sople cada día. En ráfagas el viento peina las olas y debe hacerles sentir tan bonitas que se levantan para que les vean. Más lejos la luna juega con el...

Riqueza (emocional) contra el aburrimiento

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Estímulo visual He aprendido que la observación es mucho más que un método de conocimiento. En mi caso se ha convertido en una fuente inagotable que alimenta mi curiosidad a la vez que me sirve para ejercitar la empatía. Años de miradas curiosas me han llevado a reflexionar mucho sobre las causas de situaciones que parecen causantes de infelicidad. A una de ellas le dediqué un post hace ya un tiempo, concretamente se trata del  aburrimiento , entendiendo que mi preocupación tiene que ver con las implicaciones negativas que entendía que tenía para quienes los sufren. Básicamente orientaba ese primer relato hacia claves que puedan explicar qué es ese sentimiento y, sobre todo, qué hacer para combatirlo. Hoy la propuesta es dar un paso más y golpear en la línea de flotación al efecto más perverso del aburrimiento que es la apatía, la inactividad y la atonía emocional vinculada a ella. Un cuento sobre la riqueza emocional. La primera propuesta es abrir boca con un cuent...

Descubriendo la ilusión, los sueños y los deseos

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Después de los interesantes comentarios al post " Reivindicando a los verdaderos Reyes Magos " me he puesto a la tarea de desarrollar más cómo entiendo que debemos rehabilitar (educar) la ilusión. Sueños, deseos e ilusiones. Buenos deseos Lo primero que me venía a la mente era la impresión de que hoy en día priman los deseos frente a los sueños o las ilusiones, y además en la peor de sus versiones posibles. Quede claro desde el principio que entiendo que los tres son imprescindibles en una vida emocional sana. Los sueños, por ejemplo, son un espacio de fantasía, de desarrollo de la capacidad de imaginar y de recrearse con los productos de la misma. Soñar nos mantiene tan vivos como el hecho de alcanzar los sueños. Pero el sueño unas veces se alcanza y otras veces no. No es el caso de los deseos. Lo que se anhela tras el deseo es de materia concreta, real. Uno desea lo que puede obtener con trabajo, suerte, una combinación de ambas o por otros caminos.  La ilusión apare...

Cuento sobre veletas (o cómo las cosas se pueden ver y sentir de distinta manera).

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De pequeño acostumbraba a mirar a lo alto. Resultaba una manera de cruzar fronteras inexpugnables, al menos con la mirada. Desde mi corta estatura me encantaba observar los tejados de las casas y soñaba con crecer tanto como para poder mirarlos sin tener tortícolis. Tan bajito me sentía pequeño y por eso admiraba el mundo que habitaba en la cima de mi ciudad, el mundo de los tejados. A veces mi padre me llevaba a una colina cercana y la visión de los tejados a mis pies me hacía sentir poderoso. Fueron muchos años de mirar hacia arriba, de subir a la colina y escrutar la vida del techo de mi ciudad. De entre todas las cosas que conformaban ese universo había una que destacaba entre las demás, era mi favorita. Era el único habitante con movimiento en un mundo inmóvil y por ello a mi me pareció el más vital, el más interesante. Una tarde de viento sur mi padre me llevó a la colina. Hacía calor y, aquel día, la subida se hizo más dura. Ya sentados en la cima, ubicados más altos que cual...

Cuento sobre los sueños e ilusiones

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Como continuación natural del último post no me resisto a publicar este cuento escrito por mi hace muchos años y que creo que viene como anillo al dedo... A LA HORA DE PERSEGUIR PECES DE COLORES Las doce. Un gallo cantarín, de esos que viven en los relojes hechos para ciegos, avisaba que el sol de la mañana había llegado al mismísimo centro del cielo. Uno nunca sabe cuando están de buen humor los peces de colores. Y es que ya se sabe que son un poco caprichosos y creidillos, por eso de ser los más bonitos de los mares, con eso de que todos los miramos, los requetemiramos y los admiramos... El calorcito con el que el sol del verano nos despierta, hace que me entren ganas de jugar. Por eso he decidido ir a buscar a los peces de colores, con idea de atraparles y de divertirnos juntos. La noche había estado tranquila, y el mar se había dormido sereno. Así que pensé que los peces habrían podido descansar bien. Aún más importante que el hecho de querer jugar con ellos con todas las...