Reivindicando a los verdaderos Reyes Magos (Educar la ilusión)

Recientemente a través de twitter leía entre curioso y asombrado la historia en la que la periodísta Mariela Rubio  (@marielarubio) relataba la carrera de obstáculos y emociones a la que se había tenido que enfrentar para conseguir el regalo que había pedido su hija a los Magos de Oriente. Poco después, y casualmente por esa misma red social, lei un post titulado "Los Reyes Magos no saben psicología" sobre lo ineficaz de sus regalos.


Reyes Magos
Mi impresión es que hemos caido en una trampa. Me explico, la historia de los Reyes ha sido reescrita sin que nos hayamos dado cuenta. No hace tanto, cuando era yo el que esperaba que amaneciera el día 6 de Enero, la venida de los Magos cumplía varias funciones importantes y que hoy se nos han extraviado. Por una parte estaba la experiencia de la magia por la que todos, grandes y pequeños, recibían un detalle, un paquete cuyo contenido solía ser más generoso de lo esperado. Por otra parte estaba la preocupación sobre si yo mismo habría sido merecedor a los ojos de esos personajes de un regalo, de la realización de alguno de mis deseos en forma de juguete. Además estaba la ilusión, la sorpresa, la sensación de tensión que no me dejaba dormir ante la inminente llegada de un paquete mágico para mi, junto con la incertidumbre sobre su contenido.

Hoy hay muchas casas en las que los niños no terminan de abrir sus regalos...son demasiados. La magia hace también que ya no solo lleguen regalos a tu casa sino que los Reyes, que deben tener algún error en la base de datos con las direcciones de los niños, dejan también otro montón de paquetes donde los abuelos, los tios, en la escuela... En Euskadi, además, con esto de la singularidad tenemos al Olentzero que también obsequia a los niños la Nochebuena. Un no parar!!!!!. No me gusta nada todo esto. Pero siendo malo, lo peor es la certeza que tienen los niños que los Reyes les traerán justo el tipo, modelo y color de juguete que previamente habían señalado en un catálogo de unos grandes almacenes...

¿Qué nos ha pasado? ¿Dónde ha quedado la magia?, ¿y la ilusión? ¿Quién quiere el puesto de Rey Mago con la tensión que supone dar con el regalo exacto que, casualmente, es el que está de moda?

Me resulta evidente que se nos ha ido algo de las manos, como en otros aspectos. Nos han cambiado la historia y estamos haciendo un papel marcado, distinto y sobre todo NEGATIVO.

Reivindico el derecho de los niños a recuperar la ilusión, y que los adultos se la eduquemos desde sus primeros pasos con experiencias ricas, con nuestro modelo, con magia, con sorpresas. Si hay alguna emoción realmente regeneradora de energía personal esa es la ilusión que se dibuja delante nuestro como una enorme sonrisa sincera que te contagia.


Reivindico la sorpresa con envoltorio frente al regalo a la carta, la incertidumbre que tensa, que emociona y que ilusiona frente a la certeza de lo que esta de moda, la seguridad que nos vende un modelo consumista de Navidad que mata su magia. Quiero, en definitiva, dejar de colaborar con ese cuento de los "Reyes del Encargo" y seguir escribiendo yo la historia de los Reyes Magos.  

Comentarios

  1. Me gusta comprobar que soy un "bicho raro" pero menos...jajaja. Al hilo de tu entrada y extendiendo el asunto regalo a otros ámbitos yo soy de las que practico el regalo sorpresa, hecho con estas manitas (continente y contenido, de reciclaje ese envase de colores vivos aprovechable, una propaganda con la que hacer papiroflexia...) cuando nadie lo espera y os puedo asegurar que la emoción alcnaza cotas altas, sí sí, desvolver un regalito y no tener ni idea de lo que habrá dentro y al abrir comprobar su calidad humana es algo que deberíamos retomar con ahínco no de cualquier manera, porque si las fiestas navideñas,que aborrezco, han perdido feeling mucho en parte es por ese cosumismo que le hemos ido imprimiendo a todo, dejando en el baúl de los recuerdos aquellas madrugadas del cinco al seis de enero que rebosaban felicidad, incluso cuando pensabas que los Reyes no debían entender tu letra pues no te habían traído nada de lo que les pediste.
    saludos ecológicos, reciclados, y multicolor.

    daniela

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  2. CARTA A LA REINA MAGA
    Querida Reina Maga:


    Poca cosa te pido, zapa-titos,
    ya tengo; cami-setas, también,
    pantalón y algún traje...
    en el fondo de aquél
    (dígase armario ropero).
    Las cosas que te pido no son
    las que se compran en el
    SUPERMARKET.
    No. Yo te pido cariño
    y algún beso...¡mmmm!
    pues también y lo digo
    sonriendo, que la risa, es vergel.
    Anda Reinita Maga, Reina, Reina
    Maga, majita, traéme un buen
    cargamento y...rosquillas con miel
    (ya puesta a pedir).

    daniela bartolomé

    Perdón soy yo, Daniela de nuevo no me he podido reprimir de enviaros este poema titulado:
    "Carta a la Reina Maga" espero que os haga sonreir.

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  3. Realmente me resulta un temazo hablar de cómo hemos dejado de educar en la magia a los niños, es decir, educar en la importancia de aquello fuera de toda lógica, de la importancia en lo que no se ve, en lo intangible, en lo simbólico, en la ilusión y, sobre todo, en la esperanza. Pero ciertamente esta carencia se nota especialmente estas fiestas. El mundo del control, del resultado inmediato, de lo material, de la certeza y la obsesión por la seguridad (fruto del miedo y la falta de esperanza) se expresa con fuerza en la Fiesta de los reyes Magos. Yo anhelo que seamos capaces de devolver a los niños la magia por los Reyes Magos, pero sobre todo por la vida, pero para ello creo que yo como adulto debo recuperarla los adultos primero.
    Yo Voy a comenzar a aplicarme con esto de los regalos con los adultos:
    • voy a valorar más el esfuerzo que otro hace por regalarme, el hecho de que se haya acordado etc… que el regalo en sí;
    • intentaré no dar pistas de que regalo quiero y expresar que prefiero que me sorprendan y no acierten a que acierten y no me sorprendan porque para acertar ya me suelo comprar yo lo que quiero;
    • intentaré no cambiar el regalo si alguien ha puesto esfuerzo en ello, porque vale más el afecto y la ilusión que la otra persona me expresa con su regalo que la utilidad del regalo o mis propios gustos;
    • no usaré jamás tarjetas regalo para que alguien se compre lo que quiera,
    • no me compraré mis propios regalos para que otra persona me los regale ni pediré que se compre algo que luego se lo pago,
    • haré los regalos en el día exacto que se precise
    • dejaré de decir como no necesito nada por favor no me regales nada y diré “aunque no necesito nada en concreto necesito de tus regalos en días especiales porque simbolizan el afecto que me tienes, me lo recuerda y además lo actualiza para que no se quede viejo
    • Evitaré comprar regalos y haré yo algo más que buscar y pagar o los complementaré con algo manual, más artesano, más mío…
    • Evitaré las marcas, los regalos caros.
    • No explicaré los regalos, muchas veces no atienden a razones explicables sino a afectos invisibles y mágicos. Los envolveré con frases mágicas como “me dio el punto”, no sé por qué lo he hecho, me sentía con ganas, fue un impulso, me recuerda a ti o a nosotros, felicidades, te quiero, esto es porque tu eres tu…

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    Respuestas
    1. ...totalmente de acuerdo...O aprendemos a vernos y a cambiar los adultos, o no se lo podremos transmitir a los peques...Y, lo más triste, ellos no podrán tener esos recuerdos, esas sensaciones (que luego se quedan dentro de ti para siempre) que tuvimos nosotros...Tenemos que recordar, y reforzar, la importancia de lo invisible, de lo intangible, de lo simbólico; alimentar la ilusión...

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  4. Gracias Daniela y anónimo por vuestras aportaciones. No solo es una cuestión de emociones sino también de hábitos y convicciones. Recojo vuestros "regalos" en forma de comentario e intentaré continuar este post profundizándolo.
    Una confesión, el mejor regalo que un bloguero puede recibir es comentarios como los vuestros. Mi esfuerzo queda compensado de sobra y la sonrisa que visto me va a durar, al menos, todo el dia. GRACIAS!!!!

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  5. Hola a todos y todas!
    Yo no tengo hijos y no sé desde esa experiencia cómo acabaría enfocando el tema, pero es evidente que la ilusión de fantasía que tendría que tener el tema de los reyes, Olentzero, etc.. se ha perdido totalmente en la vorágine del concepto regalos, objetos, consumo, catálogo, etc... El otro día una amiga me sorprendía contándome que ella y su pareja llevan a sus tres hijos (en edad aún de creer) a comprar los regalos con ellos los días de Navidad. Los críos creen que los aitas compran los regalos, por tanto, cada uno en función de sus posibilidades y dentro de una lógica, y los Reyes son los que se encargan de repartirlos dejándolos en casas diferentes. No tienen la creencia de que pueden pedir ilimitadamente, entiéndase. Y lo curioso es que les parece de lo más normal, incluso en clase no cuentan nada de eso, no le dan importancia. Un abrazo.
    Blanca

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  6. Esto me dejaron los reyes muy magos, con algunos defectillos en la escritura que mira que les digo que me echen una mano…, pero ‘na’ ni caso. La culpa la tienen el arado, la hoz y la guadaña que fueron la pluma de mis manos:

    Aires nuevos circulan por la pradera de mis sueños.
    Los cachalotes se desperezan cuando salen de sus pequeños huecos entre la yerba, y las hormigas se balancean en los columpios entre frondoso bosques de ramas de higueras. La luz es mas nítida debajo del mar de los abedules, y la cabeza de los asnos rebuzna entre manada de ovejas. Listo para salir de su cajón, el caballo salpica con su espuma a las rocas que lo rodean, y el calamar ennegrecido nos salpica en bicicleta por la carretera. Los pájaros se ríen a carcajadas jajajajajajaaaaaa…, jugando con los niños en la sabana, mientras las lanzas del lo Maoríes les adorna las plumas de sus alas.
    Noche feliz la de los ciervos en su bosque encantado llenos de hadad, duendes, silfos, gnomos ensimismados, donde todo es real a nuestros ojos. La lunita se apacigua sin el sol que la caliente y saca pecho y se ríe con su negra melena al viento. Los ojos de mi serrana se pliegan lentamente, entre pestañas que sus pensamientos mueven. La campana tañe sonidos de gloria un canto a la vida que algunos recogemos sin miedos y entre la dicha del camino emprendido para llegar jubilosos al país de los sueños.
    molina

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  7. Pues yo vengo de una familia numerosa, somos cinco hermanos y recuerdo las interminables noches de reyes, haciendo turnos para levantarnos y comprobar que los de oriente no habían tenido tiempo aún de dejar sus maravillosos (fueran lo que fuesen) y mágicos regalos. Buscando detalles que nos indicaran que no andaban escondidos por el salón o el balcón...De vez en cuando uno los escuchaba hablar en el salón y/o veía una silueta, distinguiendo barbas, capas, coronas y todos corríamos a comprobar que era cierto ¡y lo era! la imaginación bien alimentada es fantástica...Era una de las sensaciones más hermosas vividas en mi niñez, y que ahora, preparándome para ser mamá, deseo trasladar a mi bebé. Toda esa ilusión, imaginación y grandes momentos que deseo él-la viva y no se pierda.
    http://hilosbotonesycucharones.wordpress.com/

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  8. la magia, sigue como la inocencia de un niño hermoso. no hay q romper sus creencias de niño, sino ocntinuarla, la magia sigue, los reyes existen a aprtir del nacimiento del niño Dios, que continua con la magia y presencia del amor a dios y de todos los niños, mediante el esfuerzo de cada rey q hay en el hogar. si existe y seguira existiendo mientras haya fe y el amor a Dios y alos niños.

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