La satisfacción y la gestión del cambio



Buscando equilibrio

Una de las novedades que queríamos aportar este año 2012 desde el blog era la de tejer red, hacer más participativo el papel de las personas que seguís los avances o los delirios de "entrenando emociones". Pues este post es la primera muestra de trabajo "on line" por parte de algunos miembros de la red. Muchas gracias a todos por sumar!!!!





Satisfacción y gestión del cambio.

El vértigo del desequilibrio
La cuestión que nos proponemos es la de analizar qué nos hace sentir satisfechos y observar las diferentes maneras de vivir esa emoción. También queremos reflexionar sobre la relación  que pueda existir entre sentirse satisfecho y cambiar.



Lo primero que me viene a la mente cuando pienso en satisfacción es un equilibrista. Y es que satisfacción es un estado de equilibrio más o menos inestable. Decía Antonio Molina, nuestro querido poeta, que creía que nunca se esta satisfecho con lo que hacemos, pero la vida se hace más llevadera si haces el camino por tu propio convencimiento... ¡¡¡¡¡A toda maquina!!!!!, diria él. 

La satisfacción es buscar el equilibrio
Este juego de equilibrios parece tener que ver con la vida y su dinámica de cambio permanente tanto del contexto externo como del interno de cada individuo, lo que nos obliga adaptarnos a esos movimientos con los que interactuamos. Por una parte la vida nos impone cambios que encajamos (o no) y por otra parte somos nosotros mismos los que podemos propiciar (o no) cambios.

En general la satisfacción consiste en una valoración subjetiva del resultado de esa constante relación con un universo en cambio. Creo que no buscamos intencionadamente ese equilibrio, sino que se trata más bien de que vivimos inmersos en una dinámica cíclica de satisfacción -insatisfacción. Dado que la satisfacción es una valoración subjetiva, las expectativas y las ilusiones que uno tenga pueden influir en ese grado de satisfacción. El inquieto se halla en una actitud permanente de búsqueda y posiblemente encuentre satisfacción tanto en el hecho de moverse por los vericuetos que sus inquietudes le indiquen, como por el logro de ciertas metas personales. Por el contrario la persona cómoda encuentra más satisfacción en no realizar movimientos que alteren la tranquilidad en la que se encuentra. Supongo que la vida da oportunidades para vivirla unas etapas desde un punto de vista más inquieto y otras más cómodo.


Cambiar es buscar nuevos equilibrios satisfactorios
Nuestras necesidades, metas, inquietudes, sueños e ilusiones nos empujan a la búsqueda de la obtención de ciertos logros. Sentimos equilibrio cuando estamos en estado de satisfacción, cuando nuestras metas se han logrado. Pero este estado dura el tiempo en que reemplazamos los objetivos conseguidos por unos nuevos, lo que nos vuelve a llevar a un estado de cierta insatisfacción en el que volvemos a sentir desequilibrio.


Ese cambio nos genera emociones que pueden interpretarse de manera positiva en la línea de identificarlas como oportunidades, o por el contrario pueden ser leídas por el individuo como riesgos vinculados a temores y otro tipo de emociones con carga negativa. Se trata, en definitiva, de cómo enfrentarse a las fuerzas que nos alteran, que ponen en riesgo nuestras posiciones en zonas de confort.

Pensar en satisfacción puede llevarnos a reflexionar sobre su relación con otros conceptos como acomodación, aceptación, conformidad y, felicidad. Vinculando estas ideas fuerza llego a algunas conclusiones:

- Observamos la satisfacción como una emoción frágil, que aunque puede prolongarse en el tiempo está sometida a muchos factores que pueden afectarla, puesto que abarca tantos aspectos como facetas tiene la persona.
- Entendemos que en la vivencia de la satisfacción se dan grados de intensidad diversos que dan sentido a la expresión "plena satisfacción"
- Aunque parezca paradójico las personas pueden sentir satisfacción explorando intencionalmente sus insatisfacciones.
- Puede llegar un momento en el que la persona  se instale o se acomode porque realmente este feliz con el equilibrio que ha alcanzado. Este equilibrio puede ser un estado de sabiduría o sencillamente de conformidad ante la dificultad del cambio.
-  La felicidad es mucho más que la obtención de satisfacción, aunque está relacionada.
  
Surfeando la vida para estar satisfecho

Con la colaboración de:
Antonio, Lukas, Blanca, Yuri, Conchita y Pablo.

Comentarios

  1. Buen compendio! Y tú? Te has quedado satisfecho del resultado? :-)

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  2. Jajajjajjajajaja... Yo, Blanca, voy encantado de serie... La verdad es que haber podido sacar el primer post colectivo me parece un pequeño hito en la corta y humilde historia de este blog. Muchas gracias a ti y a los demás por sumar, también aquí.

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